“Me
llamo el compadre Nicolás. He sido pastor, viñatero, aprendiz de fraile,
artesano, casado, cornudo, libertino, sabio, estúpido, espiritual, ignorante y
filósofo”
Restif
de la Bretonne
Éste 3 de febrero recordamos a doscientos seis años de su
fallecimiento al escritor francés Nicolás Edme Restif de la Bretonne, maestro
de la literatura erótica, quien, aun siendo reconocido por eminentes
personalidades de la Europa del siglo XVIII como Rebecque, Goethe o Shiller, ha
sido condenado al olvido.
Bastante extensa y fructífera es la
obra de Restif la cual comienza a la edad de treinta y tres años con la
publicación de: La familia virtuosa, seguida
de: El campesino pervertido (1776), la vida de mi padre (1779), Los contemporáneos (1780), Las parisinas (1787) y La anti-Justine (1793) entre muchas
otras.
La vida de Restif se desarrolló en
un ambiente marginal y nada estable, lo que le valió el título de “autor
libertino”. Erró de aquí para allá y vivió los horrores de la revolución
francesa los cuales fueron plasmados en su obra “las noches
revolucionarias” auténticas crónicas indispensables
para el estudio del conflicto revolucionario. Así mismo, su autobiografía Señor Nicolás es una fuente fundamental
para toda aquella persona que quiera indagar en la Francia prerrevolucionaria.
Enemigo acérrimo de su similar el
Marqués de Sade, Réstif publicó una Anti-Justine,
aún más perversa.
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